El Huesca Rugby se llevó el derbi de provincias

Los únicos dos equipos en liga de fuera de la provincia de Zaragoza se enfrentaron este sábado, con victoria para los oscenses.

ENCUENTRO ARAGONÉS DE ESCUELAS DE RUGBY

El sábado comenzaba con una concentración aragonesa de escuelas de rugby en Zaragoza. El equipo técnico del Quebranta hacía una parada antes del viaje a Teruel, para crecerse orgullosos de la gran técnica de la que gozan sus escuelas.

Las escuelas oscenses del Quebrantahuesos Rugby club, hacían gala de lo aprendido durante los entrenamientos. Un gran número de escolares, de entre 4 y 12 años, llegados desde Sobrarbe, Cinca Medio y Huesca, se enfrentaban a los clubes zaragozanos y turiasonenses, en el CDM David Cañada, demostrando muy buen nivel de rugby. Más de doscientos niños y niñas demostraron la evolución y futuro que el rugby aragonés tiene en la actualidad…

FASE II LIGA ARAGONESA EN TERUEL

…y es que este fin de semana, el otro equipo del Quebrantahuesos Rugby club, el Huesca Rugby, se enfrentó a uno de los grandes del rugby aragonés. Se enfatiza lo de grande, porque el Teruel Club de Rugby es uno de los equipos con la delantera más pesada y fuerte de los equipos aragoneses. Una premisa que seguro haría las delicias de los delanteros oscenses, fieles parroquianos de las fases estáticas, que hacen de los saques de línea, pero sobre todo de la melé, toda una religión. Además, su línea tampoco es ligera que se diga, tanto los titulares como los cambios eran un desfile de kilos a los que, si se les daban metros, podían destrozar la línea defensiva del Huesca con algo de inercia. La clave era subir a la presión defensiva.

Y efectivamente, como si de un tráiler de una película se tratara, lo que se esperaba del partido fue lo que se dio. Guerra encarnizada en la melé, que los oscenses comenzaban con una primera línea mezcla de veteranía y juventud, con “Tucán” de talona titular, un joven recién ascendido al equipo senior que dará muchas alegrías al equipo, sufriendo la veteranía de los turolenses, pero que con ayuda de “Grueso” y “Gruñón” sufrían algún retroceso, pero daban la talla como nos tienen acostumbrados. Otro de los problemas que se encontraron ambas melés, es el campo mojado por la lluvia, que hacía que las segundas líneas de ambos equipos, también con menos experiencia, resbalaran con el barro y dejaran que sus “gorditos” de la primera besaran el suelo unas cuantas veces.

Cubierto el tema de las fases estáticas, el Teruel jugaba sus bazas y, aprovechando la clásica pájara inicial que parece se acostumbra el Huesca, ensayaba con la que iba a ser su mejor arma, su primer centro. Los de Héctor Pérez, no cumplían con lo acordado y, lejos de subir a la presión, daban metros a los del bajo Aragón y, su pesada línea, ganaba metros en cuanto llegaba el balón a los centros.

Afortunadamente, el Huesca sabía que los kilos al principio pueden ser una ventaja, pero moverlos con agilidad durante ochenta minutos es muy complicado. Y así fue, la intensidad fue bajando y, con dos ensayos más, el Huesca aseguraba la estrategia para la segunda parte.

El comienzo de la segunda parte asentó lo que iba a ser el resto del partido. En la primera línea entraba “Mochu”, el talona titular, que aseguraba la apisonadora de melé a la que nos tiene malacostumbrados el Huesca, un tema zanjado. En los rucks se limpiaba con más dureza y se pescaban muchos balones, aprovechando la mayor lentitud de los turolenses, aunque había que seguir aguantando sus embestidas. En la touch se seguía luchando, mención aparte a alguna sorpresa de los locales, como una de solo dos jugadores, algo nada habitual (normalmente son de entre cinco y siete), que pillaba desprevenidos a los visitantes y daba más espectáculo a la jornada y una anécdota para contar muchos años. Aunque por las garras y dientes del Teruel nunca se dio el partido por ganado, el resto fue cuaderno.

Por fin se jugaba a lo entrenado después de las jornadas de rodaje. El Huesca acumulaba rivales con la delantera abriendo huecos y, cuando se abría el balón, volaba hasta el ala, visitando su línea de veintidós en varias ocasiones y finalizando en ensayo hasta en tres ocasiones más. Se probaba como director del equipo en el puesto de 10 a “Laca”, un jugador de la cantera que ha estado tiempo sin jugar, pero que hace gala de muy buena visión de juego y que, si coge cuerpo y confianza, puede ser una muy buena incorporación a las bisagras más consolidadas del Huesca.

El partido debería haber finalizado justo después de un intento de drop de “Bardina”, que ya va tomando soberbia de diez, que, desgraciadamente, se estrelló en el travesaño. Lamentablemente, se alargó con unos cuantos golpes de castigo que se intercambiaron por melés que no acabaron en nada. Fue el único “pero” al gran espectáculo e intensidad que ambos equipos regalaron a los espectadores que acudieron al campo a pesar de la lluvia. El resultado final: C.R. Teruel 12- Huesca Rugby 38

XV Inicial:: Grueso, Tucán, Gruñón, Inspector, Mallén, Sebas, Chapis, Kukuchu, Pianista, Laca, Doctor, Bardina, Eddy Wiii, Pechomuelle y Amargo.

También jugaron: Planificación Mochu, Mate y Palpacin.

Ensayaron: Dueso, Tucán, Pianista, Pechomuelle, Sebas y Mochu.

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